En un intento desesperado por saborear la compañía de sus esposas una última vez antes de que regrese de su viaje, decide disfrutar de un poco de placer íntimo.Cuando entra en la habitación, la encuentra reclinada en la cama, abriendo las piernas con burlas.Incapaz de resistir el encanto, sumergida primero en su dulce néctar, lamiendo y fervor tierno.Su lengua explora cada grieta de sus suaves pliegues, llevándola a lo salvaje de placer.Saborea cada momento, sabiendo que podría ser su último baile íntimó.La chica, perdida en éxtasis, no puede evitar rogarle que continúe.Su lengüeta hace magia en sus áreas sensibles, guiándola al borde del clímax.A medida que siente su cuerpo tenso, sabe su tiempo para terminar este momento perfecto.Se retira, dejándola jadeando y anhelando más.Huye de la habitación, dejándose sola con sus pensamientos y el sabor perdurable de su tacto en los labios.