En pleno calor del momento, mi novia y yo decidimos llevar nuestra pasión al auto.Ella es una diosa del squirting, y esta fue su primera vez mostrando sus habilidades.Tenía a mi cámara lista para capturar cada gotita de su explosivo orgasmo.Después de una mamada alucinante, ella se acostó en el capó del auto, abriendo sus piernas para mí.La vista de su mojado coño brillando bajo la luz de la luna fue demasiado para resistirnos.Me la meto, saboreando su dulzura.Pronto, la tuve contorsionando en éxtasis, su cuerpo convulsionando cuando llegó al pico de placer.Su coño estalló, salpicando una enorme cantidad de bondad cremosa.Fue un espectáculo para contemplar, y tuve la suerte de estar allí para presenciarlo.Esto fue solo el comienzo de nuestras aventuras sexuales, y no puedo esperar para ver qué otras sorpresas tiene guardadas en la memoria.