Después de un año de estar separados, finalmente me reuní con mi ex pareja.Decidimos ponernos al día con unas copas en una habitación de hotel en México.A medida que el alcohol comenzaba a fluir, también lo hacían las ganas.No pude resistir las ganas de sentir su gran verga negra entre mis grandes tetas.Él estaba más que ansioso por cumplir mi petición, y la vista de su monstruosa verga enterrada en mi escote fue suficiente para encender aún más nuestra pasión.Nuestro encuentro lujurioso se dio un giro cuando comenzó a explorar mi gordo y gordito cuerpo, su gran polla negra encontrando su camino hacia mi coño, dándome el placer final.La habitación estaba llena de gemidos y los sonidos de nuestro intenso amor.La experiencia fue tan intensa que nos dejó a ambos sin aliento y satisfechos.Esta fue una noche que nunca olvidaría, y esperé que fuera solo el comienzo.
