Después de un largo día de trabajo en Caracas, regresé a la habitación del hotel y encontré a mi hermosa novia esperándome.Ella siempre está tan ansiosa por complacerme, y esta vez no fue la excepción.Me desnudó y comenzó a cantarme una dulce canción, que siempre me pone de humor.Luego, comenzó a trabajar su magia en mi verga dura, metiéndosela profundamente en su boca.Sabía lo que quería hacer a continuación.Había estado con ganas de probar anal con ella por un tiempo, y estaba lista para que sucediera.Le pregunté si estaba lista para ello, y ella accedió.La tomé de espaldas y entré lentamente en su culo apretado, asegurándose de que estuviera lista para ello.Ella gemía de placer a medida que iba más y más profundo, y pronto ambos estábamos perdidos en el éxtasis del momento.Después de nuestro encuentro apasionado, nos tumbamos en los brazos de los demás, satisfechos y contentos.Sabia que esto era solo el comienzo de muchas aventuras más por venir.