El día de mi cumpleaños, mi padrastro decidió estropearme con un regalo especial.Me trajo un hermoso conjunto de lencería negra que acentuaba mis curvas perfectamente.Mientras lo intentaba, no pudo resistir las ganas de tocarme y pronto, comenzó nuestra sesión caliente.Sus manos fuertes exploraron cada centímetro de mi cuerpo, haciéndome gemir de placer.Cuando finalmente me quitó las bragas, me quedé completamente desnuda, lista para que su polla palpitante me llenara.Estaba de rodillas, lista para demostrarle lo agradecida que estaba por su regalo de cumpleaños.Con la boca abierta de par en par, tomé su enorme eje, saboreando cada centímetro del mismo.Fue una vista para contemplar mientras lo llevaba profundamente en mi garganta, llevándolo salvaje de deseo.Esto no fue solo cualquier regalo de cumple años, sino un regalo especial que me dejó deseando más.