Durante una visita hospitalaria rutinaria, un paciente revela una dolencia inusual.El médico, perplejo por los síntomas, decide adoptar un enfoque científico para diagnosticar la misteriosa enfermedad.Ermado con una sonda médica, comienza su examen, centrándose inicialmente en el pulso de los pacientes.A medida que el médico profundiza en la consulta, descubre la causa raíz del problema.Con una firme creencia en el poder de la terapia, procede a tratar al paciente con 100 embestidas de su instrumento.El procedimiento es intenso y deja tanto al médico como al paciente sin aliento.La realidad de la situación se desarrolla a medida que la condición del paciente mejora, y los límites profesionales del médico se difuminan.El video captura el mundo crudo y sin filtros de la medicina, donde la ciencia satisface la sensualidad.